La auténtica historia de Shamballa.

La historia auténtica es la que sigue a continuación, obviamente relatada por nuestros guías espirituales. La verdad, como siempre sucede en todos estos casos, es muy simple.

La ciudad de Shamballa existió, como existió Lemuria o la Atlántida, hace alrededor de 5000 ó 6000 años y estaba situada en la zona de Nepal.

Era una ciudad de aproximadamente 70.000 habitantes, algo inusual para aquella época, y más aún en una zona tan desértica.

Shamballa estaba habitada por muchos espíritus de Luz que habían encarnado en esa época y usaban tecnología extraterrestre, entre ellas para cubrir con un campo de energía a la ciudad.

Los extraterrestres con los cuales estaban en contacto provenían de Orión 3, los mismos que construyeron las pirámides de Egipto y la famosa Cara de Marte.

El campo de energía que cubría la ciudad provocaba su aparición y desaparición.

Este aspecto fantasmagórico, visto a la distancia, así como también el hecho de que tenía jardines colgantes como la vieja Babilonia, hizo que los pobladores vecinos comenzaran a tejer fantasías sobre Shamballa, corriéndose el rumor de que estaba situada en otra dimensión.

A través de la tecnología extraterrestre los científicos habían construido, además de los campos de energía, puertas dimensionales que los transportaban a otros mundos, igual que ocurría con las Pirámides de Egipto, aunque la tecnología de Shamballa era superior.

Durante más de mil años, los ciudadanos de Shamballa recibieron pacíficamente a los extraterrestres de Orión 3, e incluso muchos de éstos convivieron e interactuaron con sus científicos.

Pero los extraterrestres, como siempre sucede con los pueblos tecnológicamente avanzados pero moralmente primitivos -es el caso, precisamente, de los habitantes de Orión 3, aun en la actualidad-, decidieron apoderarse de la Tierra usando esta ciudad como base logística.

No pudieron hacerlo por la tenaz oposición de los habitantes, que incluso llegaron hasta las armas, las cuales no les sirvieron de nada frente a la tecnología de los extraterrestres, que dispararon una bomba parecida a la de neutrones y destruyeron toda la ciudad junto con sus habitantes.

Y así desapareció Shamballa de la faz de la Tierra quedando solamente su leyenda, alimentada en cada época por la fantasía de cada autor que se ocupó del tema.

Y ésta es la simple historia, que en nuestro planeta siempre se repite, y que no tiene nada de extraña ni de misteriosa.

Por Horacio Velmont

Comentarios